2008-06-17

LOS PORTEADORES  

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Todos conocemos la aversión a cualquier movimiento de izquierdas progresista del sector más duro que domina la jerarquía eclesiástica. Años llevamos comprobando el ataque continuo a todo lo que supone la reducción de su poder de influencia. Los que durante 2 milenios nos han mantenido en la sumisión con el catecismo y el fuego en la mano, ahora son los que promueven la desobediencia civil frente a la educación para la ciudadanía, o los que convocan masivas manifestaciones para protestar por la ampliación de derechos individuales porque dicen que son aberraciones del ser humano.
También la unidad de España es objeto de sus movilizaciones.
Personalmente me da la sensación de que toda su retórica está dirigida a gente de perfil bajo, a gente que necesita que le digan las mismas cosas más de 100 veces, que se lo repitan hasta que de tanto oírlo se convenzan de que la mentira es verdad (podéis escuchar la COPE a diario y comprobarlo).
Curiosamente todos estos porteadores de palio nunca hablan del franquismo, del Opus, de los Legionarios de Cristo y de tantas otras posiciones de poder.
Pero dejemos de hablar del color púrpura y bajemos a ras de suelo. Todos recordamos los movimientos obreros de los años 60-70 con curas comprometidos con la lucha social.
¿Dónde están ahora?
Unos desaparecidos por ley biológica, otros callando, otros callados y otros acomodados en la sociedad de progreso, pues cierto es que de aquellos años de lucha fueron los más beneficiados en reducción de jornada. El momento actual no es el más propicio para sacar los pies del tiesto. Son pocos pero bien adiestrados, se consideran a sí mismos como especie protegida en peligro de extinción, y eso les hace sentirse fuertes y arrogantes. Manejan bien los medios, utilizan de forma óptima sus influencias y al fin y al cabo son los que finalmente orientan en asuntos tan decisivos como esos votos que hacen que un partido gane o pierda las elecciones.
Sabemos en qué plano se mueven a nivel estatal. Actualmente estamos asistiendo a una campaña de acoso y derribo.
En Navarra siempre vemos cómo PP-upn se rodea de toda clase de uniformes, sotanas y demás ralea que dé una imagen de estabilidad, unidad, defensa de los valores de toda la vida y de tantas otras engañuflas.
Si embargo, en otros lugares no es la derecha rancia y carca la que utiliza este mecanismo.
Hay muchos lugares de nuestra geografía, gobernados por PSN, en que la Iglesia Católica es la que recibe más ayudas municipales, la que tiene el beneplácito del gobierno local para conservar patrimonio que usurpó a la comunidad.
Dice el arzobispado que no reciben ninguna subvención, cuando en todas las nuevas urbanizaciones y lugares que han pasado de 200 a 10.000 habitantes se les regala terrenos en el centro del pueblo, con lo que eso significa de marginación hacia los no creyentes o los practicantes de todo lo que no sea católico.
En algunos de estos pueblos PP-upn tiene poca representación, pero no importa, el PSN les pasa por la derecha. Para ser los beneficiarios de lo que en otros sitios recibe PP-upn y que como hemos dicho hace ganar las elecciones, actúan con más conservadurismo que la misma derecha. Aún peor, pues el hecho de ser fotocopia y no original les supone un complejo que tienen que arrastrar como si de una penitencia se tratara.
Si hoy nuestra tierra fuera visitada por Rouco Verela, muchos desearían pasearlo bajo palio, pero como ya nos tienen acostumbrados PP-upn y PSOE a repartirse los puestos, 3 palos portearían los del PP y uno los del PSOE.

Enrique de Labrit


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